"Los Carreño"

Este blog guarda cinco novelas cuyo autor es Zacarías Ramo Traver. Una trilogía sobre Torreblanca (Castellón): “Las dos guerras de Aurelio Ríos”, la guerra civil en ese pueblo mediterráneo. “La pertinaz sequía”, la vida de la posguerra. “Apartamento con vistas al mar”, el boom inmobiliario y la crisis del 2008. “El robo del Tesoro Quimbaya”, el hurto de unas joyas precolombinas del Museo de América. “Una playa aparentemente tranquila”, un encausado del caso ERE, huyendo de la justicia, se refugia en una recóndita playa (Torrenostra). Salvo la primera, las demás están en forma de episodios. Ahora está publicando otra novela en episodios, Los Carreño, que es la historia de dos generaciones de una familia real e irrepetible, entre 1889 y 1949, período en el que suceden hechos tan significativos como: el Desastre del 98, la I Guerra Mundial, la Revolución Rusa, la aparición del fascismo, la Guerra de África, la Dictablanda, la II República, la Guerra Civil y el franquismo.

martes, 9 de febrero de 2016

*** El robo del Tesoro Quimbaya: los protagonistas


 
   El protagonista clave de la nueva novela es pasivo puesto que se trata del propio Tesoro Quimbaya. De él hemos hablado en posts anteriores. Ahora toca hablar de los otros personajes, los activos.
   Por un lado, están los policías que investigan el caso al que han bautizado como “Caso Inca”. Son los inspectores Eusebio Bernal, de la policía judicial, y Juan Carlos Atienza, de la Brigada de Patrimonio Artístico. Sus compañeros les han puesto de mote “El Dúo Sacapuntas” porque tienen un cierto parecido con una pareja de humoristas que triunfó en televisión española en los años noventa.
   Por otro, están cuatro jubilados, uno de los cuales es el único testigo presencial del robo lo que les impulsa a realizar una investigación paralela a la policial con la ingenua pretensión de ayudar a desentrañar el enigma del atraco. Son Jacinto Grandal, excomisario de policía, Luis Álvarez, exempleado del Canal de Isabel II, Amadeo Ballarín, dueño de una ferretería en la que ya no trabaja y Manuel Ponte, que fue empleado de Iberdrola.
   Otro grupo de personajes destacados son los autores del robo, pero de estos no podemos hablar porque le quitaríamos todo el misterio e intriga a la trama.
   Hay otros protagonistas relevantes puesto que aparecen en muchos episodios: algunos de los principales periódicos madrileños que lee, y apostilla muchas mañanas, uno de los viejos del cuarteto de policías aficionados.
   Además de los citados, hay más personajes pero son secundarios: algunos empleados del Museo de América, ciertos compinches de los atracadores, varios familiares de los vejetes, unos comerciantes chinos, una familia de gitanos, etc. Hay hasta protagonistas institucionales, como la Embajada de Colombia o el Ministerio español de Asuntos Exteriores.
   Todos ellos orbitan, de una u otra manera, alrededor del robo del tesoro que es la auténtica estrella de la novela.