"Los Carreño"

Este blog guarda cinco novelas cuyo autor es Zacarías Ramo Traver. Una trilogía sobre Torreblanca (Castellón): “Las dos guerras de Aurelio Ríos”, la guerra civil en ese pueblo mediterráneo. “La pertinaz sequía”, la vida de la posguerra. “Apartamento con vistas al mar”, el boom inmobiliario y la crisis del 2008. “El robo del Tesoro Quimbaya”, el hurto de unas joyas precolombinas del Museo de América. “Una playa aparentemente tranquila”, un encausado del caso ERE, huyendo de la justicia, se refugia en una recóndita playa (Torrenostra). Salvo la primera, las demás están en forma de episodios. Ahora está publicando otra novela en episodios, Los Carreño, que es la historia de dos generaciones de una familia real e irrepetible, entre 1889 y 1949, período en el que suceden hechos tan significativos como: el Desastre del 98, la I Guerra Mundial, la Revolución Rusa, la aparición del fascismo, la Guerra de África, la Dictablanda, la II República, la Guerra Civil y el franquismo.

domingo, 30 de octubre de 2016

*** Después de 314 días España tiene gobierno, aunque...



   Que un país democrático tenga gobierno no debería ser noticia, pero España sigue siendo diferente. Hemos estado cerca de un año sin gobierno; bueno, había uno en funciones que es tanto como no tenerlo. Y a todo eso, el PIB español ha seguido creciendo al 3,2 %, el mayor crecimiento de la zona euro. Lo que dice mucho y bien de la sociedad española y muy poco y mal de nuestros políticos. Si pudiera venderlos no les pondría precio, los regalaría.
   Tras dos elecciones en 2016, ayer el parlamento aprobó por mayoría simple el nombramiento de Presidente de Gobierno. Y lo ha hecho porque, como establece la constitución, si el 31 de octubre no había un nuevo ejecutivo nos veíamos abocados a unas terceras elecciones a celebrar el día de Navidad. Da toda la impresión de que al final a algunos les dio vergüenza que tal dislate pudiera suceder.
   Y todo porque, no solo pero si básicamente, los dos principales partidos, el PP y el PSOE, son incapaces de ponerse de acuerdo ni para tomarse un café. Es como una maldición bíblica. Hace más de un siglo que Antonio Machado escribió: Españolito que vienes/ al mundo te guarde Dios/, una de las dos Españas/ ha de helarte el corazón. Los versos machadianos siguen teniendo vigencia pues una de las dos Españas, sea cual fuere, nos lo sigue helando.
   Aunque lo que en verdad quería contaros es que si el pasado domingo os decía que el blog había llegado a las 12.000 páginas descargadas, en éste la cifra ha sobrepasado las 13.000. Esto empieza a ponerse interesante. Solo hay una realidad que empaña mi alegría: sigo sin recibir comentarios. ¡La felicidad nunca es completa!

viernes, 28 de octubre de 2016

74. Buscando una “garganta profunda”



   Los policías que investigan el Caso Inca salen del centro donde opera el Departamento de Investigación Criminal III de la UCO con el rabo entre las piernas. El capitán Peña les ha dado una detallada información sobre el Caso Keko, una macrooperación, dirigida por la Guardia Civil, contra el tráfico ilegal de mercancías, de mano de obra y de blanqueo de capitales, pero de lo que realmente les interesa no les ha contado nada. Otra ocasión en la que la rivalidad entre los cuerpos de seguridad les gasta una mala pasada.
- ¡Estoy de los picoletos hasta los mismísimos huevos! – brama Bernal.
- Desde luego –  Blanchard le da la razón -, se ha mostrado poco colaborador. Me ha dado la impresión de que el robo le importa un pimiento. Como si la desaparición de parte del Tesoro Quimbaya fuera un asunto de otro país. Y que chulito es el fulano. Me ha recordado a los carabinieri italianos, la misma arrogancia y suficiencia. ¿Qué podemos hacer?
- No hay otra que seguir presionando a nuestros mandos para que le hagan llegar al Secretario de Estado que los del tricornio nos están hurtando una información que puede ser crucial para la resolución del caso – contesta Bernal.
   Atienza, que hasta el momento ha estado callado escuchando a sus compañeros y pensando, levanta la mano como si estuviera en un aula y pidiera permiso para preguntar al profesor.
- Acabo de acordarme de que hay una fuente que quizá pudiera darnos lo que los civiles nos niegan: la información sobre la presencia de los Corrochanos en el tiroteo del polígono y el motivo por el que arremetieron contra los orientales. Veréis…
   El inspector de Patrimonio cuenta a sus compañeros que mantiene amistad con uno de sus compañeros de promoción en la Escuela de Policía que trabaja en el Centro Nacional de Inteligencia. Al decir esto, Blanchard le interrumpe.
- No será el mismo tipo al que me enviaste cuando los atentados terroristas de París del pasado noviembre y que, por cierto, se portó conmigo de chapeau.
- Sí, señor, el mismo, Pérez Recarte. Como os iba diciendo, es buen amigo mío y tengo con él la suficiente confianza para preguntarle si en el Centro saben algo de la conexión chino-gitana. Naturalmente, será una fuente que nunca podremos sacar a la luz.
- ¿Tú crees que el CNI también se dedica a asuntos de la clase del robo del tesoro? – pregunta Blanchard.
- El Centro tiene un piano con muchas teclas y las toca todas – le contesta Atienza.
- Bueno, pues llámale. Y, por supuesto, puedes asegurarle que si se convierte en nuestra garganta profunda, nuestro silencio lo tiene garantizado – asegura Bernal.
- Hablando de gargantas profundas – dice Blanchard, al que la alusión al confidente que fue decisivo en el Caso Watergate parece que le ha avivado las neuronas -, aunque sabéis la opinión que tengo de los vieillards amigos del comisario Grandal, creo que otra fuente para saber algo más de los gitanos del tiroteo podría ser ese patriarca amigo de monsieur Ponte.
- ¿Qué estás proponiendo, Michel, que le pidamos a Grandal que presione a Manuel Ponte para conseguir nueva información de los García Reyes? – pregunta Atienza -. No me parece lo más indicado. Recuerda que la última entrevista que tuvimos con Ponte estuvo a punto de acabar como el rosario de la aurora.
   El inspector francés es incapaz de reprimirse, cada vez que escucha una frase hecha que desconoce el impulso de conocer su significado es superior a sus fuerzas. Y es lo que ocurre en momentos tan poco oportunos como éste.
- ¿Qué significa acabar como el rosario de la aurora?
   Atienza, que conoce bien la pasión que siente el franco-hispano por acrecer y actualizar su español que, por cierto, lo habla más impecablemente cada día y aunque el momento no es el más indicado, le contesta:
- Es una frase coloquial que se usa para referirse a un hecho o suceso que sabemos o presentimos que va a acabar mal. Otro día te cuento su origen, pero volvamos a tu propuesta. Creo que es una buena idea, el problema será como ponerla en práctica. Recuerda que en aquella reunión en la cafetería Van Gogh, tanto tú como Eusebio no estuvisteis demasiado diplomáticos con el viejo. Y si la memoria no me es infiel, creo recordar que al final del interrogatorio, nos conminó a que no volviéramos a preguntarle nada más sobre el Tío Josefo. Que si queríamos saber algo del patriarca que se lo preguntáramos nosotros. Ya me dirás como vamos ahora a pedirle que vuelva a retomar sus entrevistas con el gitano.
- Niego la mayor – objeta Bernal -. En ningún momento estuve grosero o impertinente durante el interrogatorio al que le sometí. En cambio, él sí que se puso chulito y hasta faltón en varios momentos de la conversación. Dicho esto, estoy de acuerdo con Michel. No perdemos nada en intentar que Grandal trate de convencer a su colega para que hable otra vez con el gitano. Y dado que es cierto que Ponte con quien se puso borde fue con Michel y conmigo, tú eres, Juan Carlos, el único que debería pedirle eso al comisario Grandal.
- ¡O sea, que quién tiene que comerse el marrón soy yo! – exclama Atienza, que lo dice más como un desahogo que otra cosa pues sabe que lo que ha dicho Bernal va a misa.
   Atienza tiene por tanto dos tareas por delante: una es hablar con Pérez Recarte a ver que puede sacarle, la otra es presionar a Grandal para que convenza a Ponte de que vuelva a hablar con el Tío Josefo. La primera misión va a ser fácil, si su amigo sabe algo se lo podrá contar o, en su caso, negarse si el deber de sigilo se lo impide; si no sabe nada, misión cumplida. La segunda tarea va a ser más problemática, primero tendrá que presionar al excomisario y puede ocurrir que éste tolere la presión o que le envíe a hacer puñetas. Y luego viene la segunda parte que se le antoja igual de compleja: que Grandal convenza a Ponte. Comienza por la parte más fácil.
- ¿Lupe? Soy Juan Carlos Atienza. Que tal, como estás. Yo, como siempre, unos días buenos y otros regulares. ¿Los malos? Esos no los cuantifico. ¿Qué eso me pasa porqué soy soltero? Oye, que los solteros también tenemos nuestros problemas, no todo es de color rosa. ¿Sabes lo que más le envidio a tu marido? Que además de tener una mujer guapísima y que vale un potosí, tiene un buen humor a prueba de bombas. Y hablando de maridos, ¿está por ahí el pelma del tuyo? Pásamelo.
   Atienza y Pérez Recarte quedan en tomar una copa y charlar. La conversación gira al principio sobre lugares comunes entre viejos amigos. Uno importante es el cotilleo sobre cómo les van las cosas a otros compañeros de la época de la Escuela de Ávila. Cubierto ese capítulo, el inspector de Patrimonio se sincera con el del CNI. Le cuenta los problemas que tienen con la Guardia Civil para que les facilite información sobre el cómo y el porqué de la participación del clan de los Corrochanos en el tiroteo del polígono.
- ¿Creéis que esos gitanos tienen algo que ver en lo del robo del tesoro? – inquiere Pérez en cuya voz se nota un deje de incredulidad.
- No estamos seguros ni mucho menos, pero para que te voy a decir otra cosa: estamos tan desesperados, tan ayunos de encontrar alguna pista viable que nos abrazamos a cualquier cosa que sobresalga aunque sea una micra por encima del horizonte. Así está el panorama – confiesa Atienza.
- Comprendo. Verás, JC – así es como apodaban a Atienza en la escuela de policía -. Algo sé, pero no todo te lo puedo contar. Me jugaría algo más que el bigote si lo hiciera. ¿Lo entiendes, verdad?
- Por supuesto, Quique. Y te agradezco de antemano de lo que puedas informarme, sea poco o mucho. Y sé que no necesitas que te lo diga, pero quiero hacerlo: en todo caso esta conversación jamás tuvo lugar.
   Pérez agradece con un gesto las palabras de su amigo. Lo que puede contarle es que hace tiempo, algo más de dos años, se fraguó una extraña alianza entre la empresa china del Cobo Calleja, que maneja los hilos del tráfico ilegal de mercancías y del blanqueo de capitales, y uno de los cárteles más agresivos que quedan actualmente en Colombia: el Clan de los Varelas, así denominado porque su fundador y líder natural se llama Carlos Antonio Varela, clan que es uno de los varios grupos formados tras la desaparición de los cárteles más poderosos como el de Medellín, el de Cali y el del Norte del Valle.
- … y creemos que el principal nexo que une a los Varelas  con los asiáticos es que estos se encargan de lavar las millonadas que los sudacas sacan de la droga. Y hasta ahí puedo llegar.
- Gracias, Quique. ¿Y los gitanos qué pintan en todo esto?
- Eso, JC, tendrás que averiguarlo tú solito.

martes, 25 de octubre de 2016

73. Policía Nacional vs Guardia Civil



   El sábado, veintitrés de enero, aquellos ciudadanos que no vieron los telediarios o escucharon los informativos radiofónicos del día anterior pudieron leer en los periódicos la noticia ocurrida la tarde anterior: la Casa del Rey había emitido un comunicado informando haber concluido la ronda de consultas de Felipe VI con los líderes políticos para la formación del nuevo gobierno. La sorpresa venía en el segundo punto de la nota donde se informaba que en la consulta celebrada con Mariano Rajoy, líder de la mayoría minoritaria del Congreso, el Rey le había ofrecido ser candidato a la Presidencia de Gobierno. Oferta que el líder del PP había declinado. Ponte, que se encuentra entre los que no suelen ver los telediarios, se desayuna con la información al abrir las páginas online de El Mundo.
- ¡Joder, esta sí que es buena!, exclama en voz alta.
   ¿Y ahora qué va a pasar?, se pregunta. La respuesta la encuentra en el siguiente párrafo de la información que está leyendo: el Rey mantendrá una audiencia con el Presidente del Congreso y luego emprenderá otra ronda de consultas, tras la que procederá a hacer una nueva propuesta de aspirante a Presidente de Gobierno. Los titulares de las columnas de los comentaristas del rotativo son indicativos del desbarajuste que se ha montado. Un columnista titula: España bloqueada: ¿y ahora qué pasará? Otro aventura: Rajoy facilita el gobierno PSOE+C´s. Y un tercero echa mano del sarcasmo: Políticos, donde dije digo, digo Diego.
   El bueno de Ponte sigue dándole vueltas a la noticia que ha conmocionado al país, pues es la primera vez que tal situación ocurre en la joven democracia española, y cuyo origen, según los medios, está en el WhatsApp que el día anterior mandó el líder de Podemos al secretario general del PSOE: Pedro, tenemos que hablar sobre mi propuesta de Gobierno. Mensaje que aludía a la propuesta de Pablo Iglesias, al salir de su audiencia con el Rey, de formar un Gobierno presidido por Pedro Sánchez, con él de vicepresidente y varios de los ministerios claves dirigidos por miembros de su partido.
   A los policías del Caso Inca, la noticia política no les ha dado ni frío ni calor, están demasiado ocupados y preocupados discurriendo cómo meterles mano a sus tradicionales rivales dentro de las fuerzas de seguridad del Estado, la Guardia Civil. Bernal ha contado a su compañero el breve diálogo que mantuvo con el capitán que dirige la investigación del tiroteo en el Polígono Cobo Calleja y en el que están mezclados varios miembros del clan de los Corrochanos. Lo que tratan es conseguir que los guardias civiles les pasen la información que necesitan para discernir si los gitanos tienen algo que ver con el robo del tesoro. Atienza es partidario de que intervenga la juez que instruye el caso, mientras Bernal opina que será más eficaz y rápido recurrir a sus mandos naturales. Al fin y al cabo, aunque ambos cuerpos policiales están encuadrados en direcciones generales distintas forman parte de la Secretaría de Estado de Seguridad. Tras el forcejeo dialéctico se impone la tesis de Bernal de pedir al Jefe de la Brigada de Patrimonio que toque las teclas oportunas para que la Guardia Civil les facilite la información que buscan.
   El capitán Fernando Peña, segundo jefe del Departamento de Investigación Criminal III de la UCO, les recibe cortésmente, aunque su semblante permanece serio. Sin ninguna clase de preámbulo les informa:
- Me han ordenado que les cuente cuanto sabemos, hasta el momento, sobre la Operación Keko, nombre que hemos dado a este caso. Se inició hace dos años en la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada, incoándose diligencias previas en el Juzgado de Instrucción número 4 de Fuenlabrada. Se trata de una red de tráfico ilegal de mercancías y de blanqueo de capitales, amén de otras muchas actividades delictivas. Está compuesta básicamente por ciudadanos chinos a los que imputamos delitos contra la Hacienda Pública, blanqueo de capitales, contrabando, pertenencia a organización criminal y falsedad documental. Hemos podido determinar un posible fraude de más de 684 millones de euros. El mecanismo fraudulento consiste en importar grandes cantidades de mercancías eludiendo los correspondientes impuestos. Al mismo tiempo, la organización blanquea sus propios activos mediante una compleja red operada por testaferros y empresas instrumentales. La red facilita igualmente a empresarios el blanqueo de sus activos por el que cobra comisión.
- Bien, capitán – se atreve Bernal a interrumpir la explicación del oficial –. Como le dije ayer, todo eso a nosotros no nos interesa porque no le vemos conexión con nuestro caso. Lo que queremos saber es el papel de los Corrochanos.
- Cada cuestión en su momento, caballeros, pues no he terminado mi informe. Además de todo lo anterior, la organización controla varios talleres de confección, presuntamente ilegales, en los que trabajan ciudadanos chinos cuyas identidades son utilizadas fraudulentamente en otras actividades ilegales. La operación la encabezamos desde la UCO, pero además de nosotros, intervienen agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana, del Servicio Cinológico, así como funcionarios de la Agencia Estatal de Administración Tributaria y la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Además, estamos apoyados por personal de Europol en labores de inteligencia y análisis forense. La última información es que esta misma mañana nuestros agentes han entrado en algunos talleres regentados por la organización y han comprobado la existencia de personas indocumentadas trabajando en condiciones de explotación – Llegado a este punto, el oficial se calla, como si ya hubiese dicho cuanto podía informar.
- Bien, capitán. Gracias por su informe – le agradece Bernal con una pizca de mala leche -, pero seguimos sin saber cómo se desarrolló la acción armada y qué papel jugó en ella el clan de los Corrochanos.
- No les puedo contar mucho más porque no hemos podido interrogar a todos los participantes. Varios de ellos pudieron escapar, otros están internados en diferentes hospitales públicos con heridas de diversa consideración y hay tres fallecidos – responde el oficial -. En cuanto las diligencias estén ultimadas se las haremos llegar por conducto reglamentario.
- Se lo agradecemos, capitán – Atienza interviene por primera vez -, pero como bien sabe el conducto reglamentario es desesperadamente lento y no podemos esperar tanto. Aunque sea de modo provisional, ¿podría adelantarnos algo de lo que sucedió? Nos puede ser de gran ayuda.
   El guardia civil arruga imperceptiblemente el gesto, como si la petición hecha por el inspector de Patrimonio le fastidiara, pero contesta a su demanda:
- En cuanto a la acción armada, lo que puedo adelantarles es que a media mañana del pasado día veintidós un grupo indeterminado de individuos, de etnia gitana, irrumpieron en el almacén principal de la organización, que teníamos bajo vigilancia, exigiendo a grandes gritos que querían ver a Xiao Guedong, el gerente de la empresa, aunque el verdadero cabecilla de la red es un tal Jun Wang. Al decirles que el señor Guedong no estaba preguntaron por Weizhen Yang que es el segundo de la compañía. En ese momento, el referido señor Yang no podía recibirles les contestaron. A partir de ahí, los hechos se sucedieron rápidamente, aunque lo que pasó todavía no está del todo confirmado. Según los trabajadores del almacén de origen chino que han prestado declaración, los gitanos profirieron toda suerte de amenazas, luego sacaron armas blancas con las que les amenazaron y finalmente comenzaron los disparos.
- ¿Los Corrochanos fueron los que comenzaron a disparar? – pregunta Bernal pues ese extremo no le ha quedado claro.
- Es uno de los puntos que tenemos que constatar. Según los chinos, fueron los gitanos los que iniciaron el tiroteo, pero la única declaración que hasta ahora tenemos, procedente de uno de los gitanos detenidos, manifiesta que fueron unos tipos que salieron de las oficinas del almacén los que abrieron fuego contra ellos. En balística están comprobando los casquillos que hemos podido recoger y cuando se hayan hecho todas las pruebas, sabremos algo más sobre el tiroteo. Al final de la acción nos encontramos con tres individuos fallecidos, un gitano, un oriental y uno de los vigilantes de nacionalidad colombiana, varios heridos de distinta gravedad y un cierto número de participantes que lograron huir, entre ellos buena parte del grupo gitano. Y es cuanto puedo decirles.
   Como si estuvieran cronometrados, un guardia llama a la puerta del despacho.
- Con tu permiso, mi capitán, el comandante quiere verte ahora mismo.
- Caballeros, el deber me reclama. Creo que conocen la salida. Ha sido un placer.

domingo, 23 de octubre de 2016

*** Llueve en Madrid y…



   Está lloviendo en Madrid y en casi toda la península ibérica. Desde hace unos días, una borrasca atlántica impulsada por los vientos ábregos se ha colado por el golfo de Cádiz y está regando con generosidad las habitualmente resecas tierras peninsulares. Pero realmente no quería hablaros de eso en este post, si lo hago es porque me ha distraído el repiqueteo de la lluvia en los cristales de la ventana. Lo que quería deciros es que el blog ha llegado a las 12.000 páginas descargadas. No es que sea un youtuber con millones de seguidores. Lo mío es más de andar por casa, pero lo acepto tal como es. Lo acepto, me alegro y me estimula. Las páginas vistas en el último mes han sido casi cuatro mil. Para mí son cuatro mil alegrías. Gracias a mis desconocidos lectores.