Al escuchar los lamentos de Eloísa acerca de los problemas que tienen para conseguir alimentos, la tía Mechita, como quien no quiere la cosa, dice:
-Igual puedo ayudaros…
Eloísa vuelve a de casa de la tía Mechita más contenta que un niño con un pirulí. En cuanto se marcha de la farmacia el último cliente cuenta a sus hermanos el motivo de su alegría.
-¿Sabéis lo que me ha contado la tía Mechita? Que igual nos puede ayudar en lo de procurarnos más comestibles. Resulta que a través de su yerno diplomático, aunque no está en España, nos puede conseguir comida en el economato que los ingleses han montado en el consulado para sus empleados y algunas familias británicas que la guerra ha pillado en Madrid –Al oír lo que cuenta Eloísa el jolgorio que se monta en la farmacia es general hasta que Julio pone algo de orden.
-A ver, chicos, no vendamos la piel del oso antes de cazarlo. Eloísa cuéntanos cómo piensa ayudarnos la tía Mechita.
Eloísa les explica que el consulado británico ha autorizado a la tía Mechita que use los vales para comida que le correspondían a su yerno que, al no estar en la capital, no puede utilizarlos. Como en su casa solo son dos personas y mayores todos los meses le sobran cupones…
-Y al conocer nuestras dificultades, se le ha ocurrido que uno de nosotros la acompañe al economato de la embajada cuando mensualmente vaya a por los comestibles que le corresponden, pero que, en lugar de sacar solo los que ella necesita, los pedirá todos, y los sobrantes nos los pasará a nosotros. Naturalmente, los tendremos que pagar, pero con lo que saquemos del economato cree que no volveremos a pasar hambre. La única pega, es que no son productos frescos sino que vienen envasados directamente desde Inglaterra.
-¡Bendita pega! –exclama una contentísima Pilar-, con las ganas que tenía de comerme un buen rosbif inglés.
-¿Y qué clase de comestibles son? –quiere saber Paca.
-Los he apuntado en un papel –y Eloísa lee-: Full English Breakfast, pudin de Yorkshire, roast dinner, bangers and Mash, fish fingers, chips and beans, chicken Tikka Masala, jellied Eels y un montón más de comidas que no me ha dado tiempo a apuntar. Y a veces también tienen Fish and Chips que tampoco sé qué es.
-Cuando llegue Luis le diré que nos lo traduzca.
En cuanto a media tarde aparece Verdú, se apresuran a contarle el extraordinario hallazgo que ha supuesto encontrar a la tía Mechita y le piden que les traduzca los platos ingleses que tiene apuntados Eloísa.
-Creo que os los puedo explicar casi todos. El breakfast es un desayuno inglés completo, el pudin de Yorkshire es una oblea de masa horneada, el roast dinner es una especie de asado, el bangers and mash son salchichas y puré de patatas, los fish fingers y chips and beans son palitos de pescado, patatas fritas y alubias, y las jellied eels son anguilas gelatinosas. Ah, y el fish and chips es pescado y patatas, el plato británico más popular.
En el frente de Levante al mal tiempo se le une la importante ayuda internacional de armamento para los republicanos y las fuerzas de Varela vuelven a estancarse. En cuanto cesa el mal tiempo, los nacionales inician tres ataques en paralelo, cuyo principal fruto es que la cuarta división de Navarra ocupa Alcossebre, pedanía en la costa de Alcalá de Chivert. Sin embargo, en la tertulia del Gijón se alegran con las noticias positivas que les llegan de ese frente.
-Nuestras tropas están contraatacando. Las baterías instaladas en Villanueva de Alcolea, al mismo tiempo que varios carros rusos de combate T-26 con base en Torreblanca, están atacando a los fascistas instalados en la ribera izquierda del río Cuevas.
Pero las lanzas pronto se tornan cañas y un mes después el signo de la guerra cambia.
-Buenas noticias –anuncia Infantes-, el 11 de junio los nuestros ocuparon en la costa el pueblo de Torreblanca, por lo que la línea defensiva XYZ formada alrededor del cauce del río Cuevas ha desaparecido. Esas conquistas han costado muy pocas bajas.
-¿Y eso a qué se ha debido? –pregunta Julio.
-A que los rojos habían abandonado sus posiciones el día anterior ante el peligro del avance de los nuestros hacia Borriol. Aunque las ofensivas de los tres Cuerpos de ejército resultan bastante desiguales: las que más han avanzado han sido las fuerzas de Valiño que han ocupado el vértice del Peñagolosa, la cota más alta de la provincia de Castellón –contesta Infantes.
El 13 de junio los nacionales alcanzan los primeros arrabales de Castellón. Como algunos vecinos se anticipan a la llegada del grueso de las fuerzas nacionales haciendo flamear banderas rojigualdas, unidades republicanas se ensañan con la población civil. Al día siguiente las fuerzas del Cuerpo de ejército de Galicia desfilan ante el general Aranda en Castellón, para dirigirse después hacia Almazora y Villarreal de los Infantes.
La tía Mechita ha avisado a sus sobrinos de que el próximo jueves se repartirán en el economato británico los comestibles que los ingleses proporcionan a su personal en Madrid. Que decidan quién la va a acompañar y que se acuerden de traer un talego o cesto para meter las latas y paquetes. Los Carreño discuten sobre quién debería ir, pero Pilar se pone muy terca en su propuesta de que debería ir ella que, además, piensa ir acompañada por Luis, porque como habla inglés les puede ayudar con los funcionarios del consulado.
-Pero, hija, que vayas tú, pase, al fin y al cabo eres una civil y puedes alegar que eres sobrina de la tía, ¿pero cómo vas a llevar al lado a un soldado republicano? Seguro que los ingleses se niegan a daros los comestibles –objeta Julio.
-Papá, lo tengo todo pensado. Si preguntan, a Luis le haré pasar por otro sobrino de la tía. Y no sabrán que es soldado, irá vestido de civil.
-¿Y a la tía Mechita no le puede parecer mal? –Julio sigue siendo renuente a la sugerencia de su hija mayor.
-Pasado mañana iremos Luis y yo a visitar a la tía. Se lo presentaré y, en cuanto le cuente que es notario y que además habla inglés, con lo que gusta a la tía presumir de amistades pijas estoy convencida de que congeniarán enseguida.
Dos días después aparece Verdú a recoger a Pilar vestido de tal guisa que casi no lo reconocen, lleva un traje de tres piezas con corbata a juego y calza unos zapatos bruñidos como si de charol fuesen. Al verle, Paca no puede contenerse.
-Ahí va, Luis, ahora sí que pareces un notario.
Como suponía Pilar, la tía Mechita y Luis congenian enseguida. Cuando termina la visita, la tía insta a la pareja a que la visiten más a menudo, así le harán compañía. Antes de irse, en un aparte, la tía pregunta a Pilar:
-Este chico ¿está soltero o casado?
-Casado, tía.
-Es una lástima, formáis una magnífica pareja. Y te diré más, si no está enamorado de ti le falta el canto de un duro -Pilar se dice que la tía podrá estar vieja, pero que su percepción se mantiene joven.
PD. Hasta el próximo viernes en que, dentro del Libro IV, Las Guerras, de la novela Los Carreño, publicaré el episodio 71. Los rojos han cruzado el Ebro